viernes, 24 de mayo de 2013

Capítulo I “8 caballos… o 96 hombres, Mujeres y niños”

•En este capítulo la autora del libro (Olga Lengyel) es la que está contando todo lo que paso en ese tiempo. Empieza a contarnos desde el año 1944 en la ciudad de Kausenburg.Nos dice que su esposo (Miklos Lengyel) es doctor y director de su propio hospital y que con el tiene 2 hijos.
Más que nada ella nos narra el ambiente de miedo que se vivía en esos tiempos. La gente no creía en los campos de concentración les era imposible creer tanta crueldad. Los militares, soldados y civiles creían que por ser arios eran superiores y estaba destinados a dominar el mundo. En esos tiempos se decía que el gobierno húngaro pro nazi le facilitaba la acción de la policía que también se conocía como la Gestapo. Nos relata las cosas horrorosas que le contaba la gente como que los militares violaban a cuanta mujer encontraba y no les importaba si fueran niñas pequeñas. Uno le conto que le tenía asco al pescado y era porque en una temporada cuando las señoras compraban pescado, cuando lo limpiaban encontraban restos humanos a raíz de que mataban a miles de judíos cerca del rio. También nos habla de que el partido Nazi ya sabía qué hacer con todas aquellas personas que no fueran arias y era la exterminación y el primer blanco serian los más de 11 millones que Vivian en Alemania y fue ahí donde se nombro a Adolf Eichmann oficial S.S el encargado de realizar “La solución final”.
Nos cuenta la autora que su esposo fue traicionado por un médico a su servicio quien había visto su nombre en la lista del régimen. Lo denuncio y aparte la extorsiono haciéndole firmar unos documentos, el primero especificaba que su hospital y su casa  habían sido rentadas al Dr. Osvalth y en el otro y en el otro que dichas propiedades habían sido vendidas al principio no quería firmar pero termino haciéndolo pues temía por la vida de sus esposo. Al final nos cuenta que la única solución era huir ya que la guerra ya había llegado al pueblo a su esposo lo deportaron a Alemania y ella aunque qeria salvarlo no podía. Un alemán le dice que el puede llevarlos a todos, que estaba por salir un tren a la misma dirección así que decidió irse con sus padres y sus hijos, cuando llegaron a la estación en vagones aptos para 8 caballos acomodaron a 96 personas partieron con rumbo desconocidos querían algo de beber tenían que darle sus prendas a los oficiales alemanes 3 personas se murieron dentro del vagón pero eso parecía no importarle a ningún oficial ,La puertas se abrieron hasta que se llego al destino


Capitulo II “La barraca”
•En este capítulo Olga Lengyel  nos  habla de cuanto ella y su familia llegan al campo de concentración, colocaron a las mujeres de un lado y a los hombres a otro de cinco en fondo y los médicos en un grupo separado, cuando llegaron las ambulancias ella pensó que era para darle atención medica a los enfermos pero en realidad las ambulancias se llevaban  a los enfermos directo a las cámaras de gas y de allí a los crematorios.
Cuando salieron del vagón ella su madre y sus hijos quedaron separados de su padre y su esposo después los hombres de la S.S empezaron a escoger gente unos a la derecha y otros a la izquierda para seleccionar a los que serian sacrificados los niños y los viejos automáticamente se les ordenaba a la izquierda, los que se resistían los golpeaban sin compasión  cuando su madre y sus hijos avanzaron hacia los seleccionadores ella cometió un grave error cuando iban a mandar de lado derecho a su hijo el mayor ella protesto y dijo no había cumplido los 12 pensó que le ahorraría los trabajos pesados en realidad le había ahorrado los trabajos forzados pero había condenado a su hijo a morir. Cuando llegaron al campamento un pelotón de soldados las metió a empujones  a una especia de hangar de 10m de ancho x 30 m de largo, les dieron orden de desnudarse y dejar todos sus objetos de valor ella tenía veneno pero no sabía cómo escondérselo  y se lo metió en una abertura del forro de sus botas, las sometieron a un examen oral, rectal y vaginal fue una experiencia horrible tenían que tenderse sobre una mesa desnudas ara dejarse tantear por ellos, luego  pasaron a un cuarto donde los esperaban hombre y mujeres con tijeras y maquinas para cortar el cabello  después pasaron a la estancia de duchas les echaron  desinfectante en la cabeza hay les dieron su ropa carcelaria les marcaba la parte de atrás del vestido una flecha roja.








Capítulo III “La barraca 2.6”
•En este capítulo habla de la barraca 2.6 que se había convertido en su nuevo hogar, la barraca era un hangar de maderas toscas y formaban una especie de establo en el interior estaba dividido por una estufa de ladrillos, eran jaulas de madera llamados “Koias” en cada metían de 17 a 20 personas, dormían con 2 mantas sucias y apestosas que les tocaban de 10 personas por manta ah falta de espacio algunas dormían en cuclillas y en otras posiciones extrañas, el techo de las barracas estaba en mal estado y cuando llovía el agua se filtraba y las que estaban en los camastros altos quedaban inundadas.
La barraca estaba completamente sucia y la tarea de ellas era mantenerla limpia. Lo más difícil, recibían 20 vasijas para 1,500 personas cada vasija tenía capacidad de litro y medio a demás les dieron una cubeta y un perol. La blocaba que era la jefa de la barraca destinaba inmediatamente el perol a evacuatorio. En las mañana limpiaban sus vasijas para que quedaran lo más limpias para recibir sus raciones de azúcar de remolacha o margarina.













Capítulo IV “Las primeras impresiones”

Este capítulo esta interesante porque nos cuenta todo lo horrible que era vivir  en las Koias por ejemplo que en la mañana solo les daban una taza de un líquido insípido y negruzco, que  llamaban "café” y a veces les daban  té. Al medio día comían sopa era realmente repugnante  ya que luego encontraban botones, cabello, hilachas, llaves, latas y hasta ratones. En la tarde  les daban pan negro con una proporción extraordinariamente alta de serrín En la noche un poco de compota de remolacha o una cucharada de margarina. La sopa y el café lo transportaban 2 internas en unas calderas enormes de 50 litros la tarea que tenían era muy difícil ya que solo eran 2 mujeres y tenían que pasar por la nieve, la lluvia y el lodo en algunas ocasiones se provocaban quemaduras graves.
Olga se pone a platicar con la jefa de su barraca sobre como la habían separado de sus padres y sus hijos en el campo y ella le dijo que seguramente ellos ya estarían muertos, ella no le creyó y la jefa le mostro los crematorios le explico que primero quemaban a los que no pueden utilizar a  los viejos y niños y que a los que ponían del lado izquierdo eran enviados al crematorio hay Olga se dio cuenta de que en vez de ahorrarle los trabajos pesados a su hijo lo había condenado a muerte. Después alguien le dijo que su marido no estaba lejos así que en la mañana se escapo de la Koia para buscarlo y termino por encontrarlo ella le conto sobre lo de sus hijos, después lo descubrieron  2 Alemanes  y los golpearon. Cuando volvió a la barraca se encontró con un señor que había viajado en el tren con ella y estaba con su hijo ella le pregunto si había visto a su hijo, el le contesto que si que lo fuera a buscar y que dijera que ya tenía 12 años y mientras corría un Alemán le dijo que era Inútil que era muy difícil que encontrar  a alguien hay.







Capitulo V “La Llamada a Lista y Las Selecciones”
Aquí Olga nos cuenta que en el campo había “selecciones periódicas” para mandar nuevas víctimas al crematorio. Había 2 llamadas una al amanecer y la otra alrededor de las 3 de la tarde. Tenían que esperar paradas por muchas horas y a las que eran acusadas de alguna infracción de las ordenanzas tenían que esperar de rodillas tenía que aguantar el frio de la madrugada eso era durante el invierno y en verano los rayos de sol les quemaban la cara y aguantando la sed. Todas tenían que estar presentes sin excepción alguna  y no importaba si estuvieran enfermas. Algunas hacían trampa y no asistían, se escondían para evitar enfermarse y cansarse pero lo pagan muy caro. Además de las llamadas ordinarias a filas, había otras especiales. Sonaba un gong y se escuchaban una orden para que se formaran en filas, en el campo de concentración había mujeres jóvenes y muchas niñas entre 13 y 14 años a ellas las castigaban obligándolas  a pasarse horas enteras arrodilladas, algunas con la cara vuelta al sol, otras con piedras sobre la cabeza, y a veces llevando un ladrillo en cada mano. Los encargados de las selecciones eran Hasse e Irma Griese, o el doctor Mengerle, el doctor Klein y otros jefes nazis. Los hombres y mujeres condenados a muerte eran llevados hacia la entrada principal de 20 a 40 personas. Allí los esperaba un camión para trasladarlos a las cámaras de gas y no solo eso también se hacía selecciones adicionales










Capítulo VI  “El campamento”
En este capítulo nos cuenta como está dividido el campamento se dividía  por la avenida principal ("Lagerstrasse") tenía unos quinientos metros de largo, flanqueaba a ambos lados por diecisiete barracas. Las barracas habían sido construidas para usarse como establos. Ahora uno estaba dedicado a retrete y otro a lavabos. La barraca No. 1 era el depósito de los alimentos. La  2 se destinaba a la administración. La "Schriebstube", era la oficina en que trabajaban unas diez internadas. Allí también se hallaba la casa de la "Lageraelteste", la soberana sin corona del campo. Las blocovas gozaban de algunos privilegios como tener pequeños cuartos arreglados y coquetos, ropa y alimento aparte de que escogían a sus  esclavas entre las reclusas. Se escogían entre las prisioneras a las policías femeninas del campo y su función era alejar a los que se acercaban mucho al alambrado para hablar con las reclusas. En la cocina había 4 mujeres y también gozaban de algunos privilegios como no comer alimento corriente. 2 de las barracas habían sido convertidas en lavabos pero no había jabón ni cepillos de dientes ni cepillos para el cabello. Tenían un lugar donde se reunían y ese era el rincón destinado a hacia el basurero en el cual ellos encontraban cosas muy lujosas. Una de sus compañeras de la Koia le regalo 2 pedazos de trapo uno lo usaba de cepillo dental y el otro de pañuelo.











Capítulo  VII “Una Proposición en Auschwitz”
Olga conoció a un hombre apuesto de ojos azules, vestido con traje carcelario de rayas, llamado Tadek  se sorprendió al ver a un hombre en la barraca para mujeres era polaco y llevaba 4 años en el campo de concentración, se convirtió en su amigo pero al parecer el no solo quería su amistad y pronto empezó a hacer insinuaciones. Tadek tenía muchos contactos con los que  intercambiaba comida por sexo. Olga decide a ir a al lavabo porque había oído que en su descanso algunos hombres compartían su comida con las mujeres y ella tenía la esperanza de que alguien se apiadara de ella entonces un viejo le regalo una patata porque el no podía comerla ya que no tenia dientes pero una mujer se la quito



















Capítulo VIII  “Soy Condenada a Muerte.”
Este capítulo trata de que Olga y su amiga Magda fueron condenadas a muerte solo porque traían una prenda extra de la que usaban siempre, se la pusieron porque estaban enfermas y aunque trataron de quitársela antes de que la Hassel se les acercara ella si lo noto y las golpeo hasta más no poder y las designo a las selecciones, las condeno a muerte ,Algunas de sus compañeras nos creían que todo lo del crematorio y las cámaras de gas fuera verdad pensaban que eren mentiras de las bloco vas para atormentarlas. Cuando estaba a punto de llegar el camión por las seleccionadas Olga le dijo a Magda que trataría de escaparse y que si la quería acompañar ella no quiso y en eso cuando estaba pensando en cómo escaparse las demás seleccionadas empezaron a gritar que alguien se escaparía, la traicionaron, estaba muy asustada y temblando cuando paso un “milagro”, se encontró un palo en el suelo lo cual en Auschwitz significada poder y autoridad, lo recogió y se mezclo con un grupo de Stubendiensts de otra barraca, después se fue hacia las cocinas y Magda había cambiado de opinión y la siguió como si nada empezó a poner los platos en orden. Luego se ofreció a ayudar a las cargadoras de los peroles de sopa, y así iba de barraca en barraca hasta llegar a la suya Magda hizo, o mismo que ella pero desapareció en otro bloque. Se cambio de ropa con otra deportada y se escondió en su koia y así logro escapar de la muerte.












Capitulo IX “La Enfermería”
En este capítulo Olga nos habla de que la nombran a ella para ser miembro del personal de la enfermería, nos dice que La Barraca 15 era la que estaba en peores condiciones de todo el campo, iban a instalar el nuevo servicio. A la derecha y a la izquierda de la entrada habían dos pequeñas habitaciones una era la "enfermería", y a la otra era la "farmacia” después se instaló un "hospital" al otro lado de la barraca, y tenían que reunían cuatrocientos o quinientos pacientes. También nos cuenta las condiciones tan feas que había en la enfermería como que  no había luz, la única que tenían procedía del pasillo tampoco había agua corriente, y era muy difícil tener limpio el lugar porque el piso era de madera aunque lo lavaban 2 veces al día con agua fría. No tenían desinfectantes. Su farmacia estaba compuesta de un gabinete de farmacia sin anaqueles, una mesa pequeña y vieja y otra mesa grande en la que ponían sus instrumentos, tenían muy pocas cosas y todas en mal estado, Uno de los mayores problemas que tenían era  el no saber si usar los instrumentos sin esterilizarles daba miedo infectar a los enfermos, su trabajo era muy pesado se levantaban a las 4:00 Am porque las consultas empezaban a las 5 y a veces tenían que atender a 1,500 enfermas, pero eso si gozaban de algunos privilegios como acerase, poder ir al baño cuando quisieran y hasta tener un “apartamento” Pero sin duda creo que lo que más destaca en este capítulo era la crueldad que se tenía con algunas enfermas ya que si no tenía cura su enfermedad eran seleccionadas para la cámara de gas, un dia ella fue testigo de algo patético, una joven y bella muchacha judía de Hungría, que se llamaba Eva Weiss, que era enfermera se contagio de escarlatina atendiendo a sus pacientes, cuando se enteró de que estaba contagiada, los alemanes acababan de abolir las medidas de tolerancia, y como el diagnóstico lo hizo médico alemán, la pobre sabía que era inevitable su traslado a la cámara de gas. Pronto llegaría una falsa ambulancia de la cruz roja a recogerla, lo mismo que a las demás enfermas seleccionadas.








Capitulo  X “ Un Nuevo Motivo Para Vivir”

En este capítulo Olga conoce a un Hombre Francés “L” que llega a la enfermería con una herida que tenía en el pie la cual lo convirtió en visitante constante a la enfermería, era una persona encantadora, todos los días les llevaba noticias alentadoras de la situación militar y política de Europa. El era la única fuente de noticias que tenían. El que Olga trabajara en la enfermería había mejorado su  situación, aunque no podía olvidar que había perdido a su familia y no sabía nada de su esposo que era la única razón. Ella estaba aborde del suicidio y “L” le dijo que tenía que tener un objetivo ella le contesto que en que lo podía ayudar, él le dijo que podría divulgar con cuidado todas las noticias que le llevaba, era importante para mantener alto el espíritu de las prisioneras, después le dijo que era la mujer ideal para hacer de oficina de correos. Le empezarían a traer cartas y paquetes y ella las  entregaría según las instrucciones que se le den, sin decirle nada a nadie  “L” le dijo que más adelante escribirían todo lo que habían visto y vivido para que cuando terminara la guerra  la guerra, el mundo tenía que enterarse de eso. Debía hacerse pública la verdad.
A partir de ese momento, Olga tuvo un motivo para vivir. Ya era miembro del movimiento de resistencia.













Capitulo  XI  "Canadá"     

Este capítulo nos habla de “Canadá” que era un edificio que estaba en Auschwitz y ni Olga sabia porque lo llamaban asi,Dentro de sus muros se almacenaban las ropas y demás pertenencias que le quitaban a los deportados cuando llegaban a la estación, o cuando se iban a duchar, o en el vestíbulo del crematorio, tenía una riqueza considerable, porque los alemanes habían animado a los deportados a que se llevasen sus objetos de valor, había especialistas dedicados a descoser forros y despegar suelas con el objetivo de encontrar  tesoros ocultos. A todos los objetos que les quitaban a los deportados, se añadía el pelo de las víctimas, procedente de los rapados de vivos y cadáveres. Los objetos que habían en el “Canadá” y que impresionaron a Olga eran coches de niños, en otra  sección habían zapatos de niños y juguetes, que siempre estaba bien abastecida.  Trabajar en el “Canadá” tenía varios privilegios  los empleados tenían oportunidades de robar Muchos robaban con la esperanza de poder comprar su libertad. Los objetos que robados “Canadá” se negociaban después en el mercado negro.















Capitulo XII “El Depósito de Cadáveres”
Este capítulo trata de que a Olga le habían asignado otro trabajo, tenían que trasladar los cadáveres del hospital tenían que limpiar los cuerpos era una tarea horrible porque los cuerpos eran de sus antiguas pacientes además no había agua para que ellas mismas se desinfectaran las manos después de haber agarrado los cadáveres, el trabajo lo hacían entre dos. Realmente era un trabajo horripilante de todos los que tuvo que hacer, Ella nos cuenta sobre una joven Polaca que estaba muy tranquila porque había escondido a su mamá en las montañas, pensaba que hay los alemanes jamás la encontrarían pero un día entre los cadáveres, descubrió el cuerpo de su querida madre, a la que creía tan segura. Otra cosa interesante de este capítulo es cuando Olga empieza a sospechar en que los alemanes le agregaban a la comida que les daban un polvo químico que era probablemente una de las causas parta que se les interrumpiera la menstruación. La Lageraelteste, las blocovas y las Stubendients no comía la alimentación ordinaria del campo, ellas se salvaban de los  desarreglos menstruales. Una vez ella hablo con una presa que trabajaba en la cocina. Le conto que tenían la orden de mezclar dicha sustancia con todos los alimentos que nos daban. pero que la mujer de la S.S lo hacía personalmente y no dejaba que nadie se acercara al polvo. También en este capítulo descubrió que a lo que los alemanes llamaban “Campo americano” no era más que un bosque donde ejecutaban a los norteamericanos.












Capitulo XIII “El "Ángel de la Muerte" Contra el "Gran Seleccionador"

En este capítulo Olga nos cuenta que las "selecciones" las hacia las más altas jerarquías femeninas del campo, Hasse e Irma Griese. Nos cuenta un poco sobre Irma un poco sobre Irma Gríese Era de estatura mediana, estaba elegantemente ataviada y tenía el cabello impecablemente arreglado, a la corta edad de 22 años era una persona sin entrañas, escogía a las víctimas sanas y enfermas, débiles e incapacitadas. Le decían el "ángel rubio de Belsen”. Olga nos cuenta que había salvado a treinta y un mujeres de las que habían seleccionado y que no estaban enfermas  y eso gracias a un acto de humanidad que había tenido el doctor Klein. Un domingo Olga fue castiga no recuerda porque pero la pusieron de rodillas y en el barro, porque había llovido por la mañana. Asi estuvieron mucho tiempo hasta que de repente el  doctor Klein le hablo ella se levanto y fue hacia donde él la esperaba, él le había llevado unas medicinas que le había prometido para sus invalidas cuando es eso se apareció Irma Griese y le dijo que él no tenía derecho de mandar que la única que mandaba en el campo era ella ,pero él le dijo que como jefe de medico también tenía derecho ella estaba muy enojada por la humillación y tenía que desquitarse con alguien y ese alguien era Olga así que la mando a llamar a su oficina Irma saco un revólver de su mesa.se  lo pasó por la sien izquierda y la golpeó la cara con el puño, una y otra vez. Pudo a verla matado pero la curiosidad de saber porque el doctor Klein había creado un puesto expresamente para ella, aunque estaba convertida en una piltrafa humana, rapada la cabeza, sucia, harapienta, y con dos zapatos de hombre, que no pertenecían al mismo par, en los pies la salvo de morir.
                                                                                                                           







Capitulo  XIV  "Organización"

Pues este capitulo habla sobre “La organización” un dia un viejo les dijo que para resistir lo unico qe tenian qe hacer era “Organizar” aunque primeramente Olga no sabia el signficado de organizar ni sabia qe tenian que organizar,con el paso de el tiempo lo fue comprendiendo, el verdadero significado de Organizar era robar ,tenian que robar para no morirse de hambre algunas empleadas robaban del “Canadá” abrigos para sus compañeras que estaban mal vestidas no era un robo común si no más bien un acto de solidaridad. Un dia su amigo “L” habia logrado “organizar” 5 cucharas las cuales les dio alpersonal de enfermeria que lo habia tendido eso a Olga la hizo muy feliz ya que siempre tenian qe sorber o lamer la comida de la cazuela y la cuhcara le era de mucha utilidad,aunque despues se la robaron. Un dia mientras esperaban a Malika una chava que negociaba chaqutas por pan y margarina una  Califactorka ósea la criada de la blocaba les propuso un trato a ella y a su amiga les daría un trozo de plazki que consistía en algo así como un pastel de patatas rallada y migas de pan, frito en margarina. a cambio de 2 tabletas de aspirina ya que tenia dolor de oídos. Ellas sabían que no estaba bien hacer eso pero al final accedieron al fin de cuentas recibiría la aspirina en la enfermería Lo único que harían seria ahorrarle el tiempo que se había de pasar en la cola.












Capitulo  XV  “Nacimientos Malditos”

En este capítulo Olga nos cuenta que el problema más angustiante era el que los planteaban los alumbramientos, cuando un recién nacido llegaba a la enfermería el y su madre eran transladadas a las cámaras de gas. Sólo cuando el bebé no tenía probabilidades de seguir viviendo o cuando nacía muerto, se perdonaba la vida a la madre y se la permitía regresar a la barraca.Ellas para salvar aunque sea a las madres simulaban  que los niños habían nacido muertos. Las mujeres daba a luz sobre mesa de reconocimiento había mucho peligro ya que hay mismo curaban heridas purulentas, cerraban con pinzas la nariz del bebe  y cuando abría la boca para respirar, le daban una dosis de un producto mortal, así fue como los alemanes las habían convertido a en asesinas. Nos cuenta también que mandaban a todas las mujeres embarazadas a la cámara de gas.
las que llegaban en transportes judíos eran colocadas inmediatamente a la izquierda cuando se las seleccionaba en la estación. Algunas lo disimulaban muy bien.
















CAPITULO XVI  “Algunos Detalles de la Vida Detrás de las Alambradas”
En este capítulo trata de que la vigilancia alemana había disminuido a fines de noviembre de 1944, desapareció las centinelas alemanas que cuidaban las alambradas. Ahora, los hombres y las mujeres de los campos contiguos tenían libertad relativa para intercambiar unas cuantas palabras a través de los vallados. Era muy peligroso estar cerca del alambrado. Todas las mañanas encontraban los trabajadores cadáveres contorsionados, que se habían quedado adheridos a los cables de alta tensión. Se corrían varios rumores de los tatuajes ,algunos creían que todos los cautivos eran tatuados en cuanto llegaban. Otros suponían que el tatuaje significaba que no iban a ser enviados a la cámara de gas, o que, cuando menos, era necesaria una autorización especial de Berlín para ejecutar a un internado o internada que hubiese sido marcado con el tatuaje. Pero lo que en realidad era que como no había regla fija. A veces, todos los deportados eran tatuados en cuanto llegaban al campo de concentración. Pero se volvía a abrir la mano más tarde, y no se tatuaba a ninguno de los internados corrientes durante varios meses. El tatuaje no era el único procedimiento para estigmatizar a los deportados. Los alemanes los marcaban con otros signos que indicaban su nacionalidad o categoría.En  la ropa, sobre del corazón, llaveaban una insignia triangular en un pedazo de tela blanca. La letra P significaba polaco; la R, ruso. La marca "N.N." (Nacht una Nebel) significaba que el que la llevaba estaba condenado a muerte. Estas palabras, que significaban "noche y niebla" se habían tomado de una organización secreta holandesa. En el campo, no tenían idea de lo que aquellas dos N querían decir. Ella se entero por los miembros del movimiento de resistencia.









Capitulo XVII “Los métodos y su insensatez”

Auschwitz era un campo de trabajo pero que barqueado era un campo de exterminascion a Olga la obligaban a participar en algunos trabajos de aquellos grupos. Tenían que cargar peroles de alimentos hasta el hospital que se encontraba casi a u kilometro había tareas totalmente inútiles se les ordenaba trasladar a mano un montos de piedras de un lugar a otro cada una de las internadas tena que llenar al borde casi dos cubetas en ocasiones tenían que cargar ladrillos y hasta baro en lugar de piedras una vez se le ordeno a Olga incorporarse al “scheisskommamdo” ósea al equipo encargado de limpiar los evacuatorios el trabajo continuaba todo el día terminaban muertas de asco y de repugnancia se limpiaban lo mas que podían y se iban a la cama el olor que desprendía la compañera de Olga que dormía junto a ella mareaba literalmente.
Había algunos comandos que trabajaban fuera del campo, salían a primeras horas de la mañana cualquiera que fuera el tiempo que hicieran los grupos tenían que hacer u trabajo con el estomago vacío . Las saldas de las prisioneras algunas de ellas vestidas con arrapos de vestidos de noche y otras con pijamas rayadas y alzadas con botas de madera el trabajo de los campos era agotador los superiores las vigilaban constantemente asegurándose que no tuvieran ni un minuto de reposo el desmallarse era un fenómeno común porque los comandos siempre figuraban personas enfermas un cierto día. Cuando abandonaron el trabajo en el campo en los labrantíos un S.S armados de un látigo los detuvo para preguntar de una musulmana cuanto tiempo llevaba ahí, la musulmana respondió 6 meces en su vida civil habia sido maestra pero no se atrevía a levantarle los ojos al S.S quien antes había sido un peluquero.
Olga la mayor parte de las veces estuvo trabajando el el capmpo de sanidad en la enfermería o en el hospital a finales del otoño de 1944 estuvo en el equipo de letrinas y solo por pura suerte pudo regresar al hospital todas las internadas del AUSCHWITZ-BYRKENAU alimentaban un único sueño y era huir sus sentimientos ivan mezclados de egoísmo porque abrigaban la esperanza de salir de aquel infierno.





CAPITULO XVIII  “Nuestras Vidas Privadas”

Aquí ella nos cuenta de que compartió su habitación con 5 personas durante seis meses.Nos cuenta un poco sobre las vidas de sus compañeras la primera La doctora “G” la más interesante de sus compañeras Había sido médico en Transilvania,todas las tardes les contaba que la blocova la había invitado a tomar el té Ellas sabían  lo que había sido el "té social" del cual les aunque la doctora insistía en pintarles de color de rosa la escena y cuando se refería a su persona. Así vivía en un mundo aparte de fantasía, que ella misma se había creado. Su segunda compañera era una mujer rubia yugoslava. Se creía doctora pero todas las de la enfermería sabían que no había nada de aquello. Lo más, podía haber estudiado el primer año de medicina tenía miedo a que los alemanes la descubrieran. Su tercera compañera era la doctora Rozsa, era pediatra checa, ella si era un médico de verdad. Le gustaba mucho su trabajo aunque era una mujer fea y chaparra entre los 55 años. Su cuarta compañera de habitación, "S.",era cirujana de primera clase, la habían llevado al campo con sus 4 hermanas, y era una verdadera mártir del cariño fraternal. Su quinta compañera era dentista. Se había casado inmediatamente antes de ser deportada y Paso su noche de bodas en el vagón de carga. La séptima era Magda, era generosa, era química de profesión. Borka, Otra compañera de habitación era  la doctora "Ó.", era todo lo contrario que la doctora G.Siempre ponía las cosas peor de lo que eran en realidad, era muy pesimista Con el tiempo, llegaron  a ser doce las mujeres en la habitación. No había ventilación y era de lo más incómodo, pero la considerábamos como un paraíso, porque estaba aparte del resto del campo, y en ella podíamos gozar de un grado mínimo de independencia.










CAPÍTULO XIX “Las Bestias de Auschwitz”
Este capítulo habla sobre Joseph Kramer, mejor conocido como "la bestia de Auschwitz y Belsen" fue el criminal número 1 en el proceso de Luneburg, Las internadas casi no lo veían. Era un hombre robusto tenía el pelo oscuro cortado a la marinera, sus ojos eran negros y penetrantes. No se olvidaba fácilmente su fisonomía dura y severa.
Un día Kramer había dictado esta orden: "El Campo No. 1 debe ser liquidado mañana al mediodía. Deberá vaciarse completamente para su inspección.










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